24/8/09

Y después de leer un rato me puse a pensar en qué hay después de la muerte. Para mí no hay nada. Y el vacío más grande me invade, me paraliza. Me da miedo la muerte. Por otro lado, la vida es una y hay que disfrutarla a pleno. Pero, ¿alguien se preocupará realmente por nosotros cuando estemos muertos?, ¿alguien llorará por nosotros? Vivimos preocupados, entregándonos a un futuro que se nos hace cada vez más indeseable, más rutinario, más cansador. No sabemos cuándo nos va a tocar morir, pero dejemos aunque sea un pasado inolvidable, en el que no dejamos de sonreír un segundo, en el que nada nos puede herir: a fin de cuentas, nada es tan grave como parece... Por eso, no me queda nada más que decir que simplemente: Que sólo la cebolla te haga llorar.

1 comentario:

Datos personales

Mi foto
soy algún cd que no quiero escuchar, un par de anteojos que se esfuerzan por ver y soy la sonrisa que generás en mí